Lo sé, la navidad tiene sus cosas malas.
Encontrar "ese" regalo para "aquella" persona.
Y buscas, preguntas, recorres calles, tiendas, revistas, bares.
Y al final sigues como al principio, bueno no, más agobiado y al borde del colapso.
Así que, qué mejor que contaros mi pequeño secreto.
Se trata de algo original, puedes modificarlo al gusto, en tamaño, color...
Es algo facilísimo, y aún mejor, un gran favor a nuestra economía,
que en navidad anda bastante escasa.
Es capaz de traer ese toque de amor y esmero que encandila a todo el mundo.
Estas navidades menos materialismo.
Que sí, que el vestido nuevo debajo del árbol quedará genial,
pero los regalos hechos a mano, a esos no los gana ni el capitalismo.
Empecemos.
Necesitaremos:
- Un marco de fotos
- Lija
- Pintura en spray
- Pinzas
- Cuerda
- Fotos
Lo primero es quitar la parte de atrás del marco, todo, el cristal y la tapa.
Lijaremos la madera para conseguir que la pintura se adhiera correctamente y no resbale, o simplemente para desgastarla y conseguir ese toque envejecido.
La verdad es que me gusta mucho la madera envejecida,
personalmente me recuerda al estilo vintage.
Al final me decidí a pintarla con spray.
Recuerda hacerlo encima de papeles, una manta o sábana,
así evitamos el mal trago de dejarlo todo perdido.
Además es recomendable hacerlo al aire libre.
Déjalo secar entre 1 y 2 horas.
No olvides las pinzas.
Si quieres volver a ese aspecto envejecido, lija de nuevo.
Por la parte de atrás del marco, amarraremos la cuerda, de un extremo al otro.
Yo aproveché las solapas de metal que sirven para sujetar la tapa, pero puedes medirlo para que te quede recto y clavar dos tornillos, uno en cada extremo.
Asegúralo con cinta adesiva.
Y ahora, busca tus fotos favoritas o incluso añade notas llenas de cariño para esa persona especial.
Ya sabéis, este mundo necesita más originalidad, actitud y destreza. Todo vale.
Saca el artista que llevas dentro y sorprende a las personas más influyentes de tu vida.
¡FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO NUEVO!
Nos leemos pronto.
Besitos, Ana.